Te proponemos un rápido análisis de esta noche electoral (mañana será un nuevo día).
El pez por la boca muere:
Ni bien se cerraron las elecciones, el Frente Para la Victoria auguró un amplio triunfo: Aníbal Fernandez, Albistur y Abal Medina aseguraron haber tenido una elección excelente y sin dudas de poder ser derrotados.
En Córdoba, si bien Luis Juez ganó la elección, a la hora de conocerse los primeros resultados se adjudicó sin miedo un triunfo bien distanciado. Luego le costó casi tres horas separarse de su seguidor, Mestre. Esto dijo alrededor de las 8 de la noche:
"¡Estamos ganando, no se vayan!" La importancia de los fiscales
Esa fue la frase común en los festejos del PRO y la Unión-Pro, en Costa Salguero, ni bien comenzaron a conocerse los primeros datos.
De Narváez fue el primero en hablar, dando un brevísimo testimonio a la prensa, dejando un claro mensaje: no se vayan.
Luego, si bien pasó desapercibido en la vorágine de la noche electoral, Solá reapareció y también se sumó al incentivo a los fiscales:
No sólo fueron desde el PRO (uno de los partidos que denunciaban la posibilidad de fraude) los pedidos de los esfuerzos por parte de los fiscales. El mismo Alejandro Tullio también llamó a que se siga el esfuerzo por un trabajo limpio y felicitó a quienes estaban llevando adelante el recuento de los votos.
La importancia de los fiscales:
Festejos mesurados, inteligentes, y otros no tanto (dentro del PRO)
Repetimos: Las palabras que se dieron conocidos los primeros resultados electorales, fueron de mesura y aliento a los fiscales. En este sentido, Gabriela Michetti (ya definitiva ganadora de la Capital, aunque con un triunfo no tan abrumador como el que esperaban y necesitaban), entendió la importancia de festejar esta victoria siempre en un tono tranquilo para no cometer los errores que sí cometió el oficialismo con Abal Medina y Albistur.
El mismo De Narváez (quizás no muy conciente del triunfo que había logrado), se mostró muy tranquilo y con un tono inteligentemente conciliador. Declaró que lo que piensa Kirchner lo tiene sin cuidado, mientras que sí le interesa que la presidenta Cristina Kirchner pueda "escuchar lo que la ciudadanía dijo".
El menos inteligente fue el líder del PRO, Mauricio Macri. Aprovechó el espacio del triunfo para hacer un recuento de lo que hizo su gestión, cosa que pareció un tanto fuera de contexto a quienes no necesariamente simpatizan con el PRO pero sin embargo reconocen la gran elección que hizo en la provincia bonaerense. ¿Quizás quiso pegarse a esta victoria para no perder terreno ante el creciente De Narváez?
La noticia del día, se pinchó el modelo
Sin dudas, el plato fuerte de estas elecciones estuvo en la derrota de Néstor Kirchner en las elecciones bonaerenses (además de Santa Cruz, Santa Fe, Mendoza, Córdoba, Salta, entre otras). El ex presidente se hizo rogar (se piensa que fue una estrategia para esperar que se terminen los programas en vivo) y recién a las 2:15 AM salió a admitir la derrota. Se lo notó nervioso, triste y cansado. Pidió silencio a los militantes en repetidas ocasiones, aceptó la derrota e invitó a que quienes ganaron demuestren madurez para permitir la gobernabilidad. Pero faltó algo que todos esperaban escuchar: en primer lugar se negó a felicitar a De Narváez, acusando que a él nunca nadie lo felicitó, y en segundo lugar y más importante aún, no supo admitir que esto fue un claro mensaje de la ciudadanía y no se preocupó por no expresar ningún tipo de deseo de conciliación y admitir que el país necesita consenso. El modelo parece haberse acabado con un Kirchner agobiado, pero como siempre, astuto para evadir a la prensa en conferencias de prensa mentirosas: cuando no hay re-pregunta, la posibilidad de llevar la respuesta para donde él quiere, logra desvirtuar la conferencia.
Aquí el audio entero para quienes se lo perdieron: